Reflexiones de un Minotauro que mira hacia el invierno
Se me clavan las fronteras en el alma. Me rompen los pulsos los ojos descerrajados de los niños aterrados que miran al ojo inquiero de nuestros televisores buscando ayuda y solo reciben indiferencia. Silencios obstinados. Apatía. Me pregunto qué memoria guardarán de nuestro olvido. Qué rencores alimentarán en el futuro. Qué piedad podrán desarrollar si nadie tiende su mano solidaria para darles un cobijo antes de que el invierno vuelva a abrasar los campos de refugiados. Haga intransitables las montañas. Coseche muertes bajo las corrientes de los mares.
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