sábado, 23 de marzo de 2013

¿Dictaduras virtuosas?


Fotograma de "El gran dictador" de Chaplin



Ayer, mientras tomaba un café en Madrid, escuché la conversación que se desarrollaba en la mesa contigua donde, dos hombres españoles de una cierta edad y una mujer extranjera, analizaban los sucesos de España y de Europa con inteligencia y hasta con un cierto grado de ironía que me hizo interesarme por sus reflexiones. 



Sin embargo, en un momento, el hombre que guiaba la charla, en un tono claramente reflexivo y exento de humor, dijo: "Si pudiera ser posible una dictadura virtuosa....", y ese arrebato de melancolía enfermiza, me hizo estremecer porque comprendí que comenzamos a perder la esperanza y que en la búsqueda de soluciones utópicas corremos el riesgo de que el fascismo y el populismo, íntimamente ligados, nos devoren.

Por otra parte, es posible que ya vivamos sumidos en una dictadura, una que tal vez lleva gobernando nuestras vidas mucho más tiempo de lo que pensamos: la temible dictadura de los mercados.

Bajo su imponente dominio los países han perdido su soberanía y se encuentran sometidos a los inclementes caprichos de una oligarquía anónima que, hasta hace unos años, nos había permitido vivir en la ficción de la libertad y hasta del libre albedrío, pero que ahora se obstina en doblegarnos en favor de ciertos intereses opacos y egoístas por los que, al parecer, merece la pena quemar a países enteros en la pira de los sacrificios.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Esto da más miedo que tus historias de terror!!!!!! Germán